Wolf x la cocina

La verdad que no entraba en mis planes… Y eso que siempre había sentido una atracción especial por el mundo de la gastronomía, pero nunca se me ocurrió en ponerme a estudiar y menos en dedicarme a ello, con mirar y probar ya era más que feliz. Además ya me desenvolvía muy bien en otros ramos como para empezar de 0 en uno tan técnico, duro y sacrificado como es el de la cocina y no era capaz de quitarme de la cabeza que era ya muy tarde para comenzar. ¿Y qué hice yo? Empezar en la cocina…


Mi plan era trabajar el verano del 2011 para después poner rumbo nuevamente al extranjero, posiblemente a San Francisco, pero justo antes de empezar el verano y justo cuando había recibido mayores responsabilidades en el trabajo, recibí la noticia de la enfermedad, lo que me obligaba a pasar 1 año en Barcelona. Para nada quería estar de brazos cruzados todo un año, así que pensé que debía aprovechar este “año sabático” para formarme en una nueva disciplina, y que mejor que meterme en la cocina… Perfecto para complementar mis estudios de Turismo y una herramienta más para el negocio del futuro, y como no, una puerta más al viaje… 

La escuela elegida, Hofmann, posiblemente sea una de las escuelas de hostelería más prestigiosas de Barcelona, la cual dispone de un profesorado muy cualificado además de unas instalaciones y un producto de primera. Oswaldo, nuestro profesor de origen venezolano, exalumno de la escuela y en la que lleva ya 8 como profesor es un gran educador y los compañeros, los que quedan, seguimos con la misma ilusión del primer día. Aprovecho este espacio para mandar un fuerte saludo a los futuros cocineros: Ion-Marius, Ignacio, Park, Estefanía, Sofía, Arí y Marco, deseo que lleguéis todos a donde os propongáis, con ilusión y muchas ganas seguro que lo conseguís.  

También debo reconocer que tengo días en los que me cuestiono la decisión de haber optado por este mundillo, días en los que me sale todo mal y en los que vuelvo desanimado a casa con ganas de mandarlo todo a la mierda, pero luego otros en los que sueño con la bonita parte de la historia, en la que me veo comenzando algo en San Francisco junto a mi socio, con un restaurante en el Lodge que me gustaría montar en el futuro o simplemente trabajando en algún pequeño local frente a la playa en alguna isla asiática… Que bonito es soñar, ¿eh? Pues de momento hay que ser realistas e ir paso a paso, y el primer escalón es un stage en AKELARRE, San Sebastian, un restaurante de 3* michelín dirigido por el chef Pedro Subijana, y Wolf estará ahí para hablaros de la experiencia en primera persona.


No podía terminar este capítulo sin hacer una mención especial a MARGOT!!! Mi mano derecha en el curso de cocina que imparte Hofmann, que por motivos varios tuvo que regresarse a México… Te hecho de menos pequeñita, ya no es lo mismo sin ti, espero que te este yendo todo bonito por tu tierra y que salgan genial las pruebas de acceso a la Universidad, quiero verte en San Francisco!!! Love u!!!